La literatura deja huellas

Es maravilloso poder contar con esta herramienta que sirve de puente entre los escritores y nuestro corazón. La literatura es mucho más que un área de conocimientos, es la realidad de nuestra mente y la viva expresión de lo que sentimos.

En este blog encontraremos material de vital ayuda para lograr alcanzar con total éxito nuestra meta académica.

No lo pierdas de vista.


sábado, 25 de septiembre de 2010

Acerca de "Los platos del diablo" de Eduardo Liendo

Comentarios:
"Los Platos del diablo nos muestra a la Literatura reflexionando sobre sí misma. Esto le brinda al libro de Liendo una gran actualidad, no desvinculado de las preocupaciones y logros formales desarrollados por la ya madura novelística latinoamericana". Sael Ibáñez (Alfaguara)

Esta novela aborda el tema espinoso del plagio. Su contundente éxito es consecuencia de la pericia sorprendente con la que el autor logra articular una intriga cuya seducción no decae nunca, llevada de la mano por una prosa limpia, precisa y mordaz.
( Monte Ávila editores, 4ª ed., 1997. 1ª reimp., 2000. 130 pp.)

Entrevista
Por Héctor Torres y Lennis Rojas

En su novela "Los platos del Diablo" se presenta un interesante diálogo imaginario entre Oscar Wilde y Jean-Paul Sartre. De alguna manera Sartre representa a la literatura de "Compromiso Social" de los sesenta, mientras que Wilde simboliza la literatura del "Arte por el arte" de los setenta. ¿Dónde está el punto de equilibrio de la función social de la literatura?
Yo, en la medida en que me aproximo más a una interpretación de lo que puede ser la escritura literaria, he llegado al convencimiento de que el primer deber del escritor es hacerlo lo mejor que le sea posible. Todo lo demás está dado por extensión. Hay escritores que le gusta establecer un compromiso social y de hecho lo hacen, y otros que no; pero en definitiva lo importante es la obra. En una oportunidad le oí decir a Alejo Carpentier algo que me parece absolutamente cierto: "Es preferible una novela policial lograda a una epopeya fallida". Todo está en el resultado.

Usted tiene un sólo libro de cuentos publicado, mientras que ha editado cinco novelas ¿Por qué, a pesar de dominar la forma, trabaja tan poco el cuento?
Yo tengo la tentación de la novela, y sobre todo la tentación de la novela breve, aunque en alguna ocasión Augusto Monterroso dijo que el gran sueño de un escritor de textos breves es escribir una novela larga, pero creo que es el género que más me interesa. En cuanto al cuento te confieso que implica un esfuerzo enorme para lograr unas poquitas páginas; hay que ser medio masoquista para escribir cuentos, porque el trabajo se multiplica y las páginas no rinden.

¿Escribe entonces minicuentos para demostrar que puede escribir con rigurosa concisión?
Bueno, yo me precio de ser un escritor intenso en el sentido de que la síntesis se me da como algo normal, casi espontáneo; o sea, yo tengo que luchar contra mi propensión a ser demasiado sintético. Incluso hay lectores que me exigen que escriba de una manera más abundante. Pero a lo mejor tienes razón, porque en el momento que yo escribí los cuentos de "El Cocodrilo Rojo", era bastante más joven que ahora; creo que la mayoría se corresponden a la época en que yo visitaba al "Taller Calicanto", en la casa de Antonia Palacios. Uno de los ejercicios literarios que se acostumbran en los talleres son los textos breves y brevísimos, y de esos textos algunos los incorporé al libro.

Cuando se sienta a escribir ¿Cómo y cuándo sabe que el material que tiene entre manos va a ser un cuento o una novela?
Yo siempre me siento con la esperanza de escribir una novela, lo que ocurre es que a veces se desinfla o desaparece del todo, y sólo queda como una ensoñación, que en los últimos meses me ocurre bastante. Por eso ahora no me aventuro a decir que estoy escribiendo un determinado asunto hasta lograr un borrador, porque ya no confío en las primeras impresiones acerca de una historia. Pero tengo tiempo que no digo "voy a escribir un cuento". Va a llegar un momento en que lo haga, pero en este momento no, porque no estoy escribiendo para revistas, ni para suplementos literarios que es una vía. Y la otra vía (acumular un libro de cuentos) sería para mí algo maratónico; esperar a tener reunidos diez, doce cuentos, es una cosa de varios años. Creo que con más facilidad podría lograr en ese mismo lapso una novela breve.

¿A qué se debe que, a pesar de haber tenido un número importante de novelistas reconocidos en el pasado, ahora tengamos tan pocos?
Yo no creo que tengamos poco novelistas, lo que ocurre es que a este país le encantan los muertos; para incluir un nuevo creador a nuestro inventario de personalidades ilustres de la literatura, tenemos que tenerlo difunto; pero yo creo que tenemos buenos novelistas que están vivos y tienen una obra magnífica. Para citarte uno que vive en este estado: Orlando Chirinos es un excelente novelista, cuando se muera lo vamos a decir en letras mayúsculas.

¿Cuáles considera que son los más destacados de la Venezuela actual?
Bueno, hay muchos. Aunque yo me había prometido no hacer inventarios, porque es fastidioso. Yo respondo por mi propio trabajo narrativo. Pero no es autosuficiencia, ni mezquindad, lo que pasa es que no soy crítico de oficio. Yo creo que Venezuela tiene ahora una cantidad enorme de novelistas y cuentistas, la mayoría de ellos relativamente jóvenes. Y no hablemos de poetas, porque tenemos excelentes poetas. Venezuela siempre ha producido una enorme cantidad de poetas de alta calidad. Se puede apostar perfectamente a un buen momento de la literatura venezolana.

Una de las características del cine venezolano es la ausencia de buenos guiones; por eso nuestra literatura puede ser una fuente útil para el cine ¿Cómo juzga el resultado de la cinta de Thaelman Urgellez "Los platos del diablo"?
Mira, ahí si no me gustaría opinar mucho, porque yo tengo una relación de gratitud esencial con Thaelman Urgellez, porque eso de que alguien se aventure a tomar un texto tuyo para realizar una versión cinematográfica, ya de por sí representa una suerte de homenaje o de reconocimiento, que no debería mal pagar con una crítica adversa a su resultado. Entonces yo prefiero eximirme de ese criterio. A mí me parece que él hizo un interesante trabajo, y además tengo una gran estimación por los actores que participaron allí.

Pero, ¿le gustó la pelicula?
Es un juicio que le dejo a los espectadores, porque me he encontrado con opiniones sobre la película de gente que sabe de cine y que tiene un juicio crítico y la ponderan muchísimo, les resulta una buena película. Fuí invitado a verla en la Universidad de Colorado, en los Estados Unidos, con una gente que no es venezolana y no tiene prejuicios al respecto. Algunos veían sus limitaciones pero reconocían un trabajo interesante. Y como no eran amigos ni enemigos de Thaelman, era un juicio más o menos ponderado.

Tratando de ser objetivo ¿Qué tanto se ajusta al espíritu de la novela la actuación de Mimí Lazo y Gustavo Rodriguez?
Mira, uno tiene que acostumbrarse a considerar que un texto literario es un texto literario, y una película es una película; es una cosa diferente. En todo caso es una versión, una recreación. Y el caso que tú me preguntas, por ejemplo, el personaje de Mimí, practicamente no existe como tal en el libro, proque es una incorporación de algunos elementos que hace Edilio Peña (el guionista) y Thaelman.

¿No siente terror de que su obra sea lectura obligada en el sistema de educación oficial venezolano? ¿No puede eso generar a futuro un rechazo de los lectores a su obra?
No, todo lo contrario; yo me siento un escritor muy afortunado de que la obra mía sea leída por cantidad de jóvenes en el bachillerato y en la universidad; y no creo que eso implique rechazo de la obra. Las obras deben defenderse solas. Los libros deben defenderse solos. Si mi libro es recomendado para ser utilizado por alumnos de un liceo, y les resulta a ellos una cosa sumamente latosa, es un riesgo del libro y algo que no se cumplió felizmente. Pero yo estoy seguro que si el libro tiene algún encanto, alguna calidad literaria que resulte atractiva, ellos van a ser sumamente receptivos y su respuesta va a ser generosa. Y la prueba es que en esta visita que yo estoy haciendo a La Victoria, muchos alumnos me expresaron con palabras generosas el gusto que habían tenido en leer esos libros, entonces no puedo decir lo contrario.

¿Por qué el nombre definitivo de "El Cocodrilo Rojo" para una obra que se conoció inicialmente como "Lágrimas de Cocodrilo"?
Mira, porque lo recogí como libro y el título de "Lágrimas de cocodrilo" para todo un libro no me gusta. Me resulta, además de manido, porque lágrimas de cocodrilo es una frase hecha, me resultaba algo como de un humor... que no me gusta; no voy a calificar ese tipo de humor, pero no me gusta. Me gusta que el humor mío permanezca dentro de un ámbito que podemos llamar el humorismo; o sea, algo un poco más sutil que la comicidad abierta completamente, como lo sugiere un título como lágrimas de cocodrilo. Pero lágrimas de cocodrilo tampoco fue el título original de ese cuento, el título original fue "Esquizofrenia", y se editó por primera vez en la revista "Hojas de Calicanto". Pero entonces el título de esquizofrenia vendía demasiado la anécdota, esa división allí entre cocodrilo y Ramón que se advierte en el conjunto del texto. Por eso modifiqué dos veces el título. Pero es un derecho que tiene un autor. De hecho, Julio Garmendia, Rómulo Gallegos y Borges le cambiaron a sus obras varias veces el título, e hicieron numerosas modificaciones en los mismos, y también lo hizo Ramos Sucre, con los textos que publicaba en la prensa. O sea, que uno no tiene que arrepentirse ni avergonzarse de esas cosas.

¿Cuál personaje lo identifica más: Perucho Contreras, Ricardo Azolar o Prudencio González?
No, yo soy Eduardo Liendo (risas). Los personajes son una derivación de nuestras ensoñaciones, de nuestras frustraciones, de nuestras percepciones; pero no somos exactamente esos personajes. Yo no soy Ricardo Azolar porque no he plagiado a nadie, no he matado a nadie; no soy Perucho Contreras porque no soy un oficinista enajenado, y no soy Prudencio porque no soy la sombra de nada. Soy simplemente un escritor que se llama Eduardo Liendo.

Primero publicó "El Cocodrilo Rojo", luego vino "Si yo fuera Pedro Infante". Relatos como "La venganza de Pepe el Toro" y "13" se encuentran presentes en la segunda obra ¿Qué fue primero: Los cuentos o la idea de la novela?
Mira, el cuento 13 es primero, lo que pasa es que (como decía Oswaldo Trejo) yo quería rendir mi novela; entonces tenía que meterle algunas cosas que la hicieran más gorda; y además ya tenía la historia de un burdel perfecta en 13, entonces dije: "¿Qué voy a hacer? No le voy a cambiar el número tampoco, no lo voy a convertir en 17", entonces la metí así como estaba. Ahora lo otro si es más interesante, porque yo había desechado el borrador de "Si yo fuera Pedro Infante" y dije: ¿Qué se puede salvar de aquí? se puede salvar el episodio de la pelea de Pepe el Toro, que por cierto no es la misma de la película, sino una imaginaria, porque es un recuerdo que tiene el personaje que no terminó de ver esa película, y después que había publicado el cuento, por varias razones que serían largas de enumerar aquí, rescaté otra vez el borrador de la novela que ya había desechado. Entonces dije: "Bueno, lo que ya publiqué como cuento también va en la novela" lo que considero también lícito. Recuerdo una frase de Enrique Bernardo Nuñez que decía: "A veces me gustaría tener una segunda versión de la vida como los autores tienen la oportunidad de una segunda versión de sus obras". Eso es lo que hizo Walt Whitman con sus "Hojas de Hierba"; le dio para arriba y para abajo hasta que quedó un libro definitivo. Rómulo Gallegos escribió algo llamado "La Coronela" antes de escribir "Doña Bárbara" que fue una versión más primitiva. García Márquez escribió una cosa llamada: "La Casa Grande" antes de escribir "Cien Años de Soledad", entonces es bueno que él haya superado ese borrador de "La Casa Grande" y haya escrito "Cien Años de Soledad". Es decir, esa es una soberanía que tiene un escritor, porque yo creo que una obra es infinitamente perfectible. Hay argumentos en contra y yo los conozco. Uno de los que opina en contra de esta posición es el doctor Uslar Pietri; él dice que el escritor maduro no tiene por qué enmendarle la plana al escritor más joven. Esa fue una polémica pública que estableció él con Miguel Otero Silva cuando éste, muchos años más tarde, hizo modificaciones a "Fiebre", una novela juvenil.

Para concluir: Una poética urgente del cuento según Liendo.
Yo privilegio algunos elementos, no solamente en el cuento si no en otras formas literarias. La intensidad es importante para mí, y la tensión, con lo cual no estoy descubriendo el agua tibia, esa es una de las virtudes que consideraba Julio Cortázar que debía tener todo cuento. Otro gusto mío, pero ese es un gusto de lector, es la diafanidad, pero entiendo que eso no es generalizable; yo aprecio mucho la diafanidad y considero que todo lo que obstaculice el discurso desde el punto de vista de su capacidad comunicacional es un estorbo para la literatura, con lo cual tampoco descubro el agua tibia, porque de alguna manera lo dijo Borges, que en una época fue ultraísta, su literatura estaba llena de metáforas, y después llegó a la mayor sencillez.

Entrevista a Eduardo Liendo

Esta entrevista a Eduardo Liendo figura en el historial del Editorial Santillana:


Narrador y docente venezolano

Hablar de Eduardo Liendo es hacerlo de las mejores páginas que se han escrito en Venezuela. Con una extensa obra cuentística y novelística, que abarca títulos como “El mago de la cara de vidrio”, “Diario del enano”, “Los platos del diablo” y “El cocodrilo rojo”, entre otros; este caraqueño nacido en 1941 representa una de las mejores opciones para la formación de un lector adolescente. Él también lo fue en su momento y, en plena promoción de su libro “Contraespejismo” (Alfaguara, 2008), celebró la importancia de las letras en el desarrollo integral de las personas.

¿Podría decirnos cuáles fueron los primeros libros que leyó cuando era un niño o adolescente?

De los libros que ocuparon mi niñez en algún momento, conservo todavía una estimulante impresión de dos volúmenes: uno titulado “Cuentos de hadas chinos” y el otro “Historias de dragones”. Ambos estaban hermosamente ilustrados y seguramente animaron mi imaginación. Pero, sobre todo, fui un ávido lector de "suplementos", historias ilustradas de una saga titulada “El caballero del antifaz”. Más tarde leí “Las aventuras de Tom Sawyer”, de Mark Twain; y “Tarzán de los monos”, de E. R. Burroughs. En el liceo le tocó el turno a “Doña Bárbara”, de Rómulo Gallegos, y a los 16 años me topé con una biografía que influyó mucho en mi admiración por la condición de escritor: “Balzac”, de Stefan Zweig.

¿Por qué cree que es importante la literatura para los jóvenes?

Su importancia creo que reside en distintos estímulos, uno de ellos sobre la imaginación del lector que le permiten enriquecer su realidad más cotidiana e inmediata con una ficticia y artística. Al mismo tiempo, puede ser un invalorable medio de conocimiento de la propia condición humana, de los sentimientos, pasiones, situaciones, historias, leyendas y mitos. También es una forma de nutrir y desarrollar el potencial del lenguaje. Los grandes escritores y poetas nos hacen más íntima y cercana la belleza.

¿Alguna vez atisbó el éxito que tendría “El mago de la cara de vidrio” en el público adolescente?

Cuando escribí el “Mago de la cara de vidrio” no tuve presente a un lector de una edad determinada, porque la televisión influye y es observada por todas las personas. Pero supongo que al idear como personaje principal a un maestro de escuela, y padre de un niño y dos adolescentes, su lectura pudo entrar en el espacio de interés de un sector juvenil. También el ingrediente humorístico puede ser un factor atractivo. No creo que ese lector sea más exigente que otros, pero por no estar muy entrenado en la lectura se requiere ganar su atención para ser seducido por el texto. Una vez que esto se logra, puede ser una persona de gran intensidad y afición.

¿Cuál recomendación le daría a los docentes para incentivar el gusto por la lectura?

Es necesario que el propio maestro disfrute y esté convencido de la importancia de la lectura para el crecimiento personal. Leer puede ser una fuente de placer y de "poder". Sólo de este convencimiento surgirán los argumentos para a su vez convencer a sus discípulos de la importancia y significación de la lectura. Supongo que el juicio de la enseñanza de "letra con sangre" no está referido aquí a los viejos métodos de coerción física. Ahora bien, el sentido de obligatoriedad de algunas tareas, de disciplina y seguimiento; es algo que puede ser de mucha utilidad en la formación pedagógica de un lector, siempre y cuando no se transforme en un método coercitivo. Jorge Luis Borges enseña que se escribe para la felicidad, no para la imposición.

¿Qué podrán encontrar lo jóvenes en “Contraespejismo”? ¿Cree que ese título abre puertas para iniciarse en su obra?

Imagino que el tono humorístico y las propuestas sorpresivas de algunos textos breves podrían ser de su interés, cuentos como “El ventrílocuo”, “La valla”, “Desventuras del otro”, “Donde se confirma, bajo juramento, cuáles fueron las auténticas armas utilizadas por el "Caballero de la cara común", “Kabeza de mujer kon sombrero”; quizás tendrían algo que decirles. Pero el lector joven puede ser muy perspicaz, "maduro" e impredecible en sus aficiones. Supongo que por su carácter de "antología" de textos presentes en mis obras novelísticas, “Contraespejismo” es un adecuado acercamiento a mi trabajo literario.

Fuente:

Vocabulario de "Los platos del diablo"

A continuación les presento un vocabulario extraído de "Los platos del diablo", el cual servirá no sólo para la ligera comprensión de la obra, sino para futuras evaluaciones:


Vocabulario de “Los platos del diablo”
Hastío: Repugnancia a la comida
Carey:
1. m. Tortuga de mar, de hasta un metro de longitud, con las extremidades anteriores más largas que las posteriores, los pies palmeados, las mandíbulas festoneadas y el espaldar de color pardo o leonado y dividido en segmentos imbricados. Su carne es indigesta, pero sus huevos se aprecian como manjar excelente. Abunda en las costas de las Indias Orientales y del golfo de México, donde se pesca por el valor que tiene en el comercio.
2. m. Materia córnea que se saca en chapas delgadas calentando por debajo las escamas del carey.
3. m. Cuba. Bejuco de hojas anchas y tan ásperas, que se usa como lija.
4. m. Cuba. Árbol de las Ramnáceas que crece en las costas pedregosas y en los cayos. Su madera se utiliza en ebanistería.
Apacible:
1. adj. Manso, dulce y agradable en la condición y el trato.
2. adj. De buen temple, tranquilo, agradable. Día, viento apacibl
Dédalo:
(Por alusión. a Dédalo, personaje mitológico).
1. m. laberinto (‖ cosa confusa y enredada)
Tartufo:
El autor MOLIÉRE Seudónimo de Jean Baptiste Poquelin (1622-1673), dramaturgo y actor francés. Sus personajes cómicos resultan familiares a todos los aficionados al teatro, pues sus obras se siguen representando y han sido traducidas a numerosas lenguas.
En Tartufo (primera versión, 1664; tercera y definitiva versión, 1669) Molière creó uno de sus personajes cómicos más famosos, el del hipócrita religioso. De la audacia de esta obra da testimonio el hecho de que el rey prohibiera su representación pública durante cinco años, pese a que él personalmente la consideraba divertida, pero tenía buenas razones para creer que la comedia, con el hipócrita y avaricioso Tartufo vestido de cura y con cilicio, ofendería al poderoso alto clero francés.
Desgarbado:
1. adj. Falto de garbo y garbo es:
1. m. Gallardía, gentileza, buen aire y disposición de cuerpo.
2. m. Gracia y perfección que se da a algo.
3. m. Bizarría, desinterés y generosidad.
Desparpajo:
1. m. coloq. Suma facilidad y desembarazo en el hablar o en las acciones.
2. m. coloq. Am. Cen. desorden (‖ confusión).
Ademán:
1. m. Movimiento o actitud del cuerpo o de alguna parte suya, con que se manifiesta un afecto del ánimo. Con triste, con furioso ademán. Hizo ademán de huir, de acometer.
Abyecto:
1. adj. Despreciable, vil en extremo
      Lacerante:
1. adj. hiriente (‖ que hiere). Dolor lacerante.
2. adj. Que produce intenso sufrimiento. Un recuerdo lacerante.
Ignominia:
1. f. Afrenta pública.
Ulular:
1. intr. Dar gritos o alaridos.
2. intr. Dicho del viento: Producir sonido.
Vertiginoso:
1. adj. Perteneciente o relativo al vértigo.
Y vértigo es:
1. m. Med. Trastorno del sentido del equilibrio caracterizado por una sensación de movimiento rotatorio del cuerpo o de los objetos que lo rodean.
2. m. Med. Turbación del juicio, repentina y pasajera.
3. m. Apresuramiento anormal de la actividad de una persona o colectividad.
~ de la altura.
1. m. Psicol. Sensación de inseguridad y miedo a precipitarse desde una altura o a que pueda precipitarse otra persona
Sobria:
1. adj. Templado, moderado.
2. adj. Que carece de adornos superfluos.
3. adj. Dicho de una persona: Que no está borracha.
Patético:
1. adj. Que es capaz de mover y agitar el ánimo infundiéndole afectos vehementes, y con particularidad dolor, tristeza o melancolía.
Paradojas:
1. f. Idea extraña u opuesta a la común opinión y al sentir de las personas.
2. f. Aserción inverosímil o absurda, que se presenta con apariencias de verdadera.
3. f. Ret. Figura de pensamiento que consiste en emplear expresiones o frases que envuelven contradicción. Mira al avaro, en sus riquezas, pobre.
Redimirlo:
redimir.
1. tr. Rescatar o sacar de esclavitud al cautivo mediante precio. 
2. tr. Comprar de nuevo algo que se había vendido, poseído o tenido por alguna razón o título.
3. tr. Dicho de quien cancela su derecho o de quien consigue la liberación: Dejar libre algo hipotecado, empeñado o sujeto a otro gravamen.
4. tr. Librar de una obligación o extinguirla. 
5. tr. Poner término a algún vejamen, dolor, penuria u otra adversidad o molestia.
Evocando:
 evocar.
1. tr. Traer algo a la memoria o a la imaginación.
Inusitadas:
1. adj. No usado, desacostumbrado.
Feligreses:
feligrés, sa.
(Del lat. vulg. fili eclesĭae, hijo de la Iglesia).
1. m. y f. Persona que pertenece a determinada parroquia.
Pintorescas:
1. adj. Se dice de los paisajes, escenas, tipos, costumbres y de cuanto puede presentar una imagen peculiar y con cualidades plásticas.
2. adj. Se dice del lenguaje, estilo, etc., con que se pintan viva y animadamente las cosas.
Sucumbirían:
sucumbir.
1. intr. Ceder, rendirse, someterse.
2. intr. Morir, perecer.
3. intr. Der. Perder el pleito.
Piqueta:
2. f. Herramienta de albañilería, con mango de madera y dos bocas opuestas, una plana como de martillo, y otra aguzada como de pico
Transeúnte:
1. adj. Que transita o pasa por un lugar. 
2. adj. Que está de paso, que no reside sino transitoriamente en un sitio.
Anatema:
2. amb. Maldición, imprecación.
3. amb. En el Antiguo Testamento, condena al exterminio de las personas o cosas afectadas por la maldición atribuida a Dios.
Asiduo:
1. adj. Frecuente, puntual, perseverante
Hallazgo:
1. m. Acción y efecto de hallar.
2. m. Cosa hallada.
Quimérica:
1. adj. Fabuloso, fingido o imaginado sin fundamento.
Apuntalada:
 apuntalar.
1. tr. Poner puntales.
2. tr. Sostener, afirmar.
Sofisma:
1. m. Razón o argumento aparente con que se quiere defender o persuadir lo que es falso.
Pernoctar:
1. intr. Pasar la noche en determinado lugar, especialmente fuera del propio domicilio.
Idílica:
1. adj. Perteneciente o relativo al idilio.
 idilio es:
1. m. Coloquio amoroso, y, por ext., relaciones entre enamorados.
2. m. Composición poética que suele caracterizarse por lo tierno y delicado, y tener como asuntos las cosas del campo y los afectos amorosos de los pastores.
Balzac:
Escritor francés creador de La Comedia Humana y uno de los grandes renovadores de la novela moderna.
Trabajador infatigable, elaboró una obra monumental, la Comedia humana; ciclo coherente de varias decenas de novelas cuyo objetivo es describir de modo casi exhaustivo a la sociedad francesa de su tiempo; según su famosa frase, hacerle "la competencia al registro civil".

Dostoievski
Fedor Dostievski  es un Novelista ruso, uno de los más importantes de la literatura universal. Su obra posee la agudeza de quien ha penetrado hasta las más recónditas profundidades del alma humana y ejerció una profunda influencia en todos los ámbitos de la cultura moderna. En los personajes de sus novelas representa las bondades y bajezas humanas de una forma tan magistral que han sido objeto de estudio del psicoanálisis desde Freud hasta nuestros días.
Rausseau:
Jean-Jacques Rousseau (GinebraSuiza28 de junio de 1712 - ErmenonvilleFrancia2 de juliode 1778) fue un escritorfilósofo y músico definido como un ilustrado, siendo parte de sus teorías una reforma a la Ilustración y prefigurando al posterior Romanticismo. Las ideas políticas de Rousseau influyeron en gran medida en la Revolución francesa, el desarrollo de las teorías republicanas y el crecimiento del nacionalismo. Su herencia de pensador radical y revolucionario está probablemente mejor expresada en sus dos más célebres frases, una contenida en El contrato social«El hombre nace libre, pero en todos lados está encadenado»; la otra, contenida en su Emilio o de la Educación«El hombre es bueno por naturaleza», de ahí su idea de la posibilidad de una educación.
Admonición:
1. f. amonestación (‖ acción y efecto de amonestar).
Lorenzo Barquero:
Lorenzo Barquero: Hijo huérfano, estudiante, orador con un buen futuro y pasado enigmático; pero a quien la vida le puso en su camino su propia destrucción. Primo de Santos Luzardo, los cuales estaban separados por una línea divisoria de enemistad creada por sus antepasados Lorenzo Barquero, víctima de la seducción de una mujer despiadada, se sumerge en el alcohol, con lo cual trae al mundo una criatura. Su hábitad va a ser la chusmita, sitio muy misterioso rodeado de miseria y abandono.
Franz Kafka:
Franz Kafka (Praga3 de julio de 1883 – Kierling, cerca de KlosterneuburgAustria3 de juniode 1924) fue un escritor bohemio de idioma alemán. Su obra es considerada una de las más influyentes de la literatura universal en el último siglo,1 a pesar de no ser muy extensa: fue autor de tres novelas (El procesoEl castillo y América), una novela corta (La metamorfosis) y un cierto número de parábolas y relatos breves. Además, dejó una abundante correspondencia y escritos autobiográficos, la mayor parte publicados póstumamente. De este material, y de las indagaciones realizadas por sus biógrafos, ha resultado la imagen de una persona profundamente sensible y físicamente débil
Frívola:
1. adj. Ligero, veleidoso, insustancial. .
2. adj. Se dice de los espectáculos ligeros y sensuales, de sus textos, canciones y bailes, y de las personas que los interpretan.
3. adj. Dicho de una publicación: Que trata temas ligeros, con predominio de lo sensual.
Diderot:
Denis Diderot (Langres, Francia, 5 de octubre de 1713 – París31 de julio de 1784escritor yfilósofo francés, importante figura de la Ilustración, editor de la primera enciclopedia, fue un intelectual polivalente.
Debe su fama por haber dirigido de 1751 a 1772 la redacción de la primera enciclopedia universal editada en Francia (la segunda del mundo occidental, pues el inglés Ephraim Chambers hizo lo mismo en 1729), bajo el nombre de La enciclopedia, o diccionario razonado de las ciencias, artes y oficios (L'Encyclopédie, ou Dictionnaire raisonné des sciences, des arts et des métiers, 28 volúmenes, 71.818 artículos, 2.885 ilustraciones). En ella participaronVoltaireD'AlembertMontesquieuJean-Jacques Rousseau y Jaucourt, entre otros.
Huraño:
1. adj. Que huye y se esconde de las gentes.
Precariedades:
precariedad.
1. f. Cualidad de precario.
Y precario es:
1. adj. De poca estabilidad o duración.
2. adj. Que no posee los medios o recursos suficientes.
Megalómano:
megalomanía
1. f. Manía o delirio de grandezas.
Expensas:
1. loc. prepos. A costa, por cuenta, a cargo de alguien.
Histrión:
1. m. Actor teatral.
2. m. Persona que se expresa con afectación o exageración propia de un actor teatral.
Lacerando:
lacerar..
1. tr. Lastimar, golpear, magullar, herir. 
2. tr. afligir (‖ causar tristeza).
3. tr. Dañar, vulnerar. Lacerar la honra, la reputación.
Mancillados:
mancillar.
1. tr. manchar (‖ deslustrar la buena fama).
2. tr. Deslucir, afear, ajar.
Obnubiló:
obnubilar.
1. tr. nublar (‖ ofuscar o confundir). .
2. tr. embelesar. .
3. tr. nublar (‖ enturbiar la visión). .
Cimentar:
cimentar.
1. tr. Echar o poner los cimientos de un edificio u obra.
2. tr. fundar (‖ edificar una ciudad, o un edificio).
3. tr. Establecer o asentar los principios de algo espiritual, como las virtudes, las ciencias, etc.
Donaire:
1. m. Discreción y gracia en lo que se dice.
2. m. Chiste o dicho gracioso y agudo.
3. m. Gallardía, gentileza, soltura y agilidad airosa de cuerpo para andar, danzar, etc.
Contertulios:
Persona con quién se conversa
Y tertulia es: tertulia.
(De or. inc.).
1. f. Reunión de personas que se juntan habitualmente para conversar o recrearse.
Sacralizados:
 sacralizar.
1. tr. Atribuir carácter sagrado a lo que no lo tenía.
Empecinada:
1. adj. Obstinado, terco, pertinaz.
Porfía:
1. f. Terquedad, obstinación.
Avizoraba:
veía
Bernard Shaw:
Shaw nació en Dublín el 26 de julio de 1856, en una familia pobre y protestante. Se educó en el Wesley College en Dublín, y emigró a Londres en 1870, para comenzar su carrera literaria.
Noviciado:
1. m. Tiempo destinado para la probación en las religiones, antes de profesar.
2. m. Tiempo primero que se gasta en aprender cualquier facultad y en experimentar los ejercicios y actos de ella, y las ventajas y daños que puede traer.
Espectro:
1. m. fantasma (‖ imagen de una persona muerta).
Evasiva:
1. adj. Que incluye una evasiva o la favorece. Respuesta evasiva Medios evasivos
2. f. Efugio o medio para eludir una dificultad.
Sarcástica
1. adj. Perteneciente o relativo al sarcasmo.
sarcasmo.
1. m. Burla sangrienta, ironía mordaz y cruel con que se ofende o maltrata a alguien o algo.
Reo:
1. com. Persona que por haber cometido una culpa merece castigo.
2. com. Der. Demandado en juicio civil o criminal, a distinción del actor.
Hierático:
1. adj. Dicho de un estilo o de un ademán: Que tiene o afecta solemnidad extrema, aunque sea en cosas no sagradas.
Catafalco:
1. m. Túmulo adornado con magnificencia, el cual suele ponerse en los templos para las exequias solemnes.
Periplo:
1. m. Viaje o recorrido, por lo común con regreso al punto de partida.
2. m. Recorrido o trayectoria espiritual de una persona.
Laxitud:
1. f. Cualidad de laxo. Laxitud de las fibras.
Y la laxo es:
1. adj. Flojo, que no tiene la tensión que naturalmente debe tener.
2. adj. Dicho de la moral: Relajada, libre o poco sana. Las opiniones laxas de algunos casuistas.
Adulancia:
adular..
1. tr. Hacer o decir con intención, a veces inmoderadamente, lo que se cree que puede agradar a otro.
2. tr. deleitar.
Pueril:
1. adj. Perteneciente o relativo al niño o a la puericia.
2. adj. Propio de un niño o que parece de un niño.
Inhibición:
1. f. Acción y efecto de inhibir o inhibirse.
Inhibir: abstenerse, dejar de actuar, prohibirse
Exculpación:
1. f. Acción y efecto de exculpar.
2. f. Hecho o circunstancia que sirve para exonerar de culpa.
Fortuito:.
1. adj. Que sucede inopinada y casualmente.
Ensoñaciones:
ensueño.
1. m. Sueño o representación fantástica de quien duerme.
2. m. Ilusión, fantasía.
Arquetipos:.
1. m. Modelo original y primario en un arte u otra cosa.
2. m. Ecd. Punto de partida de una tradición textual.
3. m. Psicol. Representación que se considera modelo de cualquier manifestación de la realidad.
Mimetizados:
1. adj. Con apariencia de los seres u objetos de su entorno.
Decrépita:
1. adj. Sumamente viejo.
2. adj. Dicho de una persona: Que por su vejez suele tener muy disminuidas las facultades. .
Satírico:
1. adj. Perteneciente o relativo a la sátira.
Sátira: composición poética u otro escrito cuyo objeto es censurar acremente o poner en ridículo a alguien o algo
Mansedumbre:
1. f. Condición de manso.
Y manso es:
De condición benigna y suave.
2. adj. Dicho de un animal: Que no es bravo.
Grotescos:
1. adj. Ridículo y extravagante.
2. adj. Irregular, grosero y de mal gusto.
Funambulescos:
1. adj. Extravagante, exagerado, llamativo, grotesco.
3. adj. Hábil para desenvolverse entre tendencias u opiniones opuestas.
Efímera:
1. adj. Pasajero, de corta duración.
Ostensible:
1. adj. Que puede manifestarse o mostrarse.
2. adj. Claro, manifiesto, patente.
Picardía:
1. f. Acción baja, ruindad, vileza, engaño o maldad.
2. f. Bellaquería, astucia o disimulo en decir algo.
Alimón:
 Dicho de torear: Asiendo dos lidiadores un solo capote, cada uno por un extremo, para citar al toro y burlarlo, pasándole aquel por encima de la cabeza.
3. loc. adv. conjuntamente.
Atemperada
moderado, acomodado a algo más
Afabilidad:
1. f. Cualidad de afable.
Plácidamente:
1. adv. m. Con sosiego y tranquilidad.
Dadaístas:
El dadaísmo es un movimiento cultural que surgió en 1916 en el Cabaret Voltaireen ZúrichSuiza. Fue propuesto por Hugo Ball, escritor de los primeros textos dadá; posteriormente, se unió Tristan Tzara que llegaría a ser el emblema del dadaísmo. Una característica fundamental del dadaísmo es la oposición al concepto de razón instaurado por el Positivismo. Dadá se caracterizó por rebelarse en contra de las convenciones literarias y artísticas y, especialmente, por burlarse del artistaburgués y de su arte.
Fatuidades:
1. f. Falta de razón o de entendimiento.
2. f. Dicho o hecho necio.
3. f. Presunción, vanidad infundada y ridícula.
Ovidio:
Publio Ovidio Nasón (en latín Publius Ovidius Naso) (Sulmona20 de marzo de 43 a. C. –Tomis, actual Constanza17 d. C.), poeta romano. Famoso sobre todo por sus obras Ars amandi y Las metamorfosis, obra en verso en que recoge relatos mitológicos procedentes sobre todo del mundo griego y adoptados por la cultura latina de su época.
García Lorca:
Federico García Lorca (Fuente Vaquerosprovincia de Granada5 de junio de 1898 – entreVíznar y Alfacaribídem19 de agosto de 1936) fue un poetadramaturgo y prosista español, también conocido por su destreza en muchas otras artes. Adscrito a la llamada Generación del 27, es el poeta de mayor influencia y popularidad de la literatura española del siglo XX. Como dramaturgo, se le considera una de las cimas del teatro español del siglo XX, junto conValle-Inclán y Buero Vallejo.
Oscar Wilde:
Escritor británico. Hijo del cirujano William Wills-Wilde y de la escritora Joana Elgee, Oscar Wilde tuvo una infancia tranquila y sin sobresaltos. Estudió en la Portora Royal School de Euniskillen, en el Trinity College de Dublín y, posteriormente, en el Magdalen College de Oxford, centro en el que permaneció entre 1874 y 1878 y en el cual recibió el Premio Newdigate de poesía, que gozaba de gran prestigio en la época. De reconocida tendencia homosexual.
Congoja:
1. f. Desmayo, fatiga, angustia y aflicción del ánimo.
Pragmático:.
1. adj. Perteneciente o relativo al pragmatismo.
2. adj. Perteneciente o relativo a la pragmática (‖ disciplina).
3. f. Disciplina que estudia el lenguaje en su relación con los usuarios y las circunstancias de la comunicación.
Endilgar:
1. tr. coloq. Encaminar, dirigir, acomodar, facilitar.
2. tr. Encajar, endosar a alguien algo desagradable o impertinente.
Epíteto:
1. m. Adjetivo o participio cuyo fin principal no es determinar o especificar el nombre, sino caracterizarlo.
Pusilánime:
1. adj. Falto de ánimo y valor para tolerar las desgracias o para intentar cosas grandes..
Cáusticamente
1. adv. m. De una manera acre, mordicante.
Cáustico: mordaz, agresivo
Hecatombe
1. f. Mortandad de personas.
2. f. Desgracia, catástrofe.
3. f. Sacrificio de 100 reses vacunas u otras víctimas, que hacían los antiguos a sus dioses.
4. f. Sacrificio solemne en que es grande el número de víctimas.
Tolstoi
Lev Nikoláyevich Tolstói (cirílico ruso Лев Николаевич Толстой), también conocido comoLeón Tolstói (Yásnaya Poliana, 28 de agostojul.9 de septiembre de 1828greg. - Astápovo, en la actualidad Lev Tolstói, provincia de Lípetsk, 7 de noviembrejul.20 de noviembre de 1910greg.) fue un novelista ruso ampliamente considerado como uno de los más grandes escritores de occidente y de la literatura mundial.1 Sus más famosas obras sonGuerra y Paz y Anna Karénina, y son tenidas como la cúspide del realismo. Sus ideas sobre la «no violencia activa», expresadas en libros como El Reino de Dios está en Vosotros tuvieron un profundo impacto en grandes personajes como Gandhi y Martin Luther King.
Nietzsche
Friedrich Wilhelm Nietzsche (AFI ˈfʁiːdʁɪç ˈvɪlhəlm ˈniːtʃə) (Röcken, cerca de Lützen15 de octubre de 1844 – Weimar25 de agosto de 1900) fue un filósofopoetamúsico y filólogoalemán, considerado uno de los pensadores modernos más influyentes del siglo XIX.
Realizó una crítica exhaustiva de la cultura, la religión y la filosofía occidental, mediante ladeconstrucción de los conceptos que las integran, basada en el análisis de las actitudes morales (positivas y negativas) hacia la vida. Este trabajo afectó profundamente generaciones posteriores de teólogosfilósofossociólogospsicólogospoetasnovelistas y dramaturgos.
Apologistas:
apología.
1. f. Discurso de palabra o por escrito, en defensa o alabanza de alguien o alg
Exégetas:.
1. com. Persona que interpreta o expone un texto.
Iconoclastas
1. adj. Se dice del hereje del siglo VIII que negaba el culto debido a las imágenes religiosas, las destruía y perseguía a quienes las veneraban. .
2. adj. Se dice de quien niega y rechaza la merecida autoridad de maestros, normas y modelos. .
Aristocráticos
1. f. En ciertas épocas, ejercicio del poder político por una clase privilegiada, generalmente hereditaria.
2. f. Clase noble de una nación, de una provincia, etc.
3. f. Clase que sobresale entre las demás por alguna circunstancia. Aristocracia del saber, del dinero
Esteticista:
1. adj. Perteneciente o relativo al esteticismo.
2. com. Persona que profesionalmente presta cuidados de embellecimiento a sus clientes.
Jean Paul Sartre:
Jean-Paul Charles Aymard Sartre (París21 de junio de 1905 – París15 de abril de 1980), conocido comúnmente como Jean-Paul Sartre, fue un filósofoescritor y dramaturgo francés, exponente del existencialismo y del marxismo humanista. Fue el décimo escritor francés seleccionado como Premio Nobel de Literatura, pero lo rechazó explicando en una carta a laAcademia Sueca que él tenía por regla declinar todo reconocimiento o distinción y que los lazos entre el hombre y la cultura debían desarrollarse directamente, sin pasar por las instituciones. Fue pareja también de la filósofa Simone de Beauvoir.

Timado:
1. tr. Quitar o hurtar con engaño.
2. tr. Engañar a alguien con promesas o esperanzas.
Souvenir:
1. m. Objeto que sirve como recuerdo de la visita a algún lugar determinado.
Lacónica:
2. adj. Breve, conciso, compendioso. Lenguaje, estilo lacónico. Carta, respuesta lacónica.
3. adj. Que habla o escribe de esta manera. Escritor lacónico. Persona lacónica.
Catártico:
1. adj. Perteneciente o relativo a la catarsis psíquica o determinante de ella.
Y catarsis es:
1. f. Entre los antiguos griegos, purificación ritual de personas o cosas afectadas de alguna impureza.
2. f. Efecto que causa la tragedia en el espectador al suscitar y purificar la compasión, el temor u horror y otras emociones.
Inerme:
1. adj. Que está sin armas. U. t. en sent. fig.
2. adj. Biol. Desprovisto de espinas, pinchos o aguijones.
Pirandeliano:
De Pirandello o relativo a este escritor italiano de finales del siglo XIX y principios del XX: la obra «Seis personajes en busca de autor» es el drama pirandelliano más representado. 
Abulia:
1. f. Falta de voluntad, o disminución notable de su energía.
Esgrimir:
1. tr. Jugar y manejar la espada, el sable y otras armas blancas, reparando y deteniendo los golpes del contrario, o acometiéndole.
2. tr. Usar una cosa o medio como arma para lograr algún intento.
Perentorio:
1. adj. Se dice del último plazo que se concede, o de la resolución final que se toma en cualquier asunto.
2. adj. Concluyente, decisivo, determinante.
3. adj. Urgente, apremiante.
Hálito:
1. m. aliento.
2. m. Vapor que algo arroja.
Epígrafe:
1. m. Resumen que suele preceder a cada uno de los capítulos u otras divisiones de una obra científica o literaria, o a un discurso o escrito que no tenga tales divisiones.
2. m. Cita o sentencia que suele ponerse a la cabeza de una obra científica o literaria o de cada uno de sus capítulos o divisiones de otra clase.
Majadería
1. f. Dicho o hecho necio, imprudente o molesto.
Excelsitud
1.    f. Cualidad de excelso.
Excelso: muy elevado, alto, eminente, de singular excelencia
Índole
1. f. Condición e inclinación natural propia de cada persona.
2. f. Naturaleza, calidad y condición de las cosas.
Descollante
1. adj. Que descuella.
Pesquisas
1. f. Información o indagación que se hace de algo para averiguar la realidad de ello o sus circunstancias.
Luctuoso
1. adj. Triste, fúnebre y digno de llanto.
Albacea
1. com. Der. Persona encargada por el testador o por el juez de cumplir la última voluntad del finado, custodiando sus bienes y dándoles el destino que corresponde según la herencia.
Verbigracia
1. m. ejemplo (‖ hecho, texto o cláusula que se cita para autorizar un aserto).
2. adv. por ejemplo.
Panegirico
2. m. Discurso o sermón en alabanza de alguien.
3. m. Elogio de alguien, hecho por escrito.
Antipodas
En lugar o posición radicalmente opuesta o contraria.
Reveron:
 fue un pintor y artista plástico venezolano. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Caracas, en España y en Francia. Se radicó en MacutoLa Guaira, (estado Vargas) -Venezuela a partir de 1921, donde realiza gran parte de su obra, en el litoral central de Venezuela, capta y transmite el impacto de la luz tropical. Es considerado el mejor pintor deVenezuela del siglo XX, se interesó profundamente por la acción de la luz sobre las formas. Entusiasta del impresionismo francés, su pintura evolucionó a la abstracción y el simbolismo. Los temas preferidos fueron el paisaje y el desnudo femenino.
Cimera:
(Del lat. chimaera, monstruo fabuloso).
1. f. Parte superior del morrión, que se solía adornar con plumas y otras cosas.
2. f. Heráld. Adorno que en las armas se pone sobre la cima del yelmo o celada; p. ej., una cabeza de perro, un grifo, un castillo, etc
Opipara:
1. adj. Dicho de un banquete, de una comida, etc.: Copiosos y espléndidos.